El aguerrido defensa brasileño Lucio, campeón del mundial Corea y Japón 2002, fue el encargado de presentar la copa (ya que sólo pueden tocarla quienes hayan ganado el título, mandatarios o Jefes de Estado) en un evento que contó con la presencia de la vicepresidenta de la República, la Intendenta de Montevideo y autoridades de AUF.
